La infraestructura hiperconvergente (HCI) combina el hardware común del centro de datos que utiliza recursos de almacenamiento conectados localmente con software inteligente, para crear bloques de construcción flexibles que reemplacen la infraestructura tradicional a base de servidores, redes de almacenamiento y matrices de almacenamiento separados. Entre sus ventajas se incluyen un TCO más bajo, un mayor rendimiento y una mayor productividad de los equipos de TI.
Durante la explosión web de los años 90 se introdujo la infraestructura con redes de almacenamiento y SAN de servidor, con módulos independientes que se podían actualizar o cambiar sin afectar a las demás capas. Esta infraestructura revolucionó los departamentos de TI y ha sido el estándar de uso desde entonces.
Pero ahora, en la era de la nube híbrida, el sistema de 3 capas ya no puede satisfacer las necesidades de TI. Es complejo y difícil de manejar, no proporciona una base firme para DevOps y no puede escalar con la misma magnitud que antes.
Actualmente, HCI es la infraestructura elegida por las empresas que quieren seguir siendo competitivas y garantizar que sus centros de datos estén preparados para la nube.
Con HCI se logra la convergencia de toda la pila del centro de datos, incluido el procesamiento, el almacenamiento, las redes de almacenamiento y la virtualización. La infraestructura tradicional, compleja y costosa, es sustituida por una plataforma que se ejecuta en servidores llave en mano, estándar del sector, y que permiten a las empresas comenzar a escalar de nodo en nodo. El software HCI que se ejecuta en cada nodo del servidor distribuye todas las funciones operativas en el clúster para conseguir un mejor rendimiento y resistencia.
HCI consta de dos componentes principales: el plano distribuido y el plano de gestión.
El plano distribuido opera en un grupo de nodos que brindan servicios de almacenamiento, virtualización y redes para aplicaciones invitadas, ya sean máquinas virtuales o aplicaciones basadas en contenedores.
El plano de gestión permite supervisar fácilmente recursos de HCI desde un único lugar y una sola vista, eliminando la necesidad de soluciones de gestión separadas para servidores, redes de almacenamiento, almacenamiento y virtualización.
Casi todas las soluciones HCI modernas de infraestructura hiperconvergente están 100% definidas por software, sin dependencia del hardware propietario. Cada nodo de HCI de un clúster ejecuta un hipervisor (Nutanix AHV, VMware ESXi o Microsoft Hyper-V) y las funciones de control de HCI se ejecutan como una máquina virtual separada en cada nodo, formando una estructura completamente distribuida que puede escalar recursos añadiendo nuevos nodos.
Los beneficios de pasar de una infraestructura tradicional compleja a la sencillez de la hiperconvergencia son muchos. Entre las principales razones por las que las empresas emprenden el cambio están los costes más bajos, un rendimiento mejorado y consistente, una huella del centro de datos más pequeña, una mayor eficiencia y productividad de los equipos de TI y un ROI de infraestructura maximizado.
Actualmente, los equipos de TI empresariales buscan formas de ofrecer servicios locales con la velocidad y la eficiencia operativa de los servicios de nube pública como Amazon Web Services (AWS), Microsoft Azure y Google Cloud. Una plataforma integral de nube empresarial tiende un puente entre la infraestructura tradicional y los servicios de nube pública. La hiperconvergencia es la base de una nube empresarial o híbrida.