¿Qué es el servicio en la nube?

¿Qué es el servicio en la nube?

El servicio en la nube es un término general que se utiliza para describir los servicios bajo demanda prestados a través de la nube. Estos servicios se otorgan a clientes y empresas que, a su vez, pueden acceder a sus aplicaciones, cargas de trabajo y otros recursos sin hardware especializado o infraestructura interna. Las tareas comunes que los usuarios pueden realizar incluyen acceder a sus correos electrónicos, trabajar en documentos colaborativos, solicitar asistencia técnica y mucho más. Casi todos los empleados dependen de algún tipo de servicio de cloud computing.

Además, los servicios en la nube son gestionados por el proveedor de servicios de la nube. En consecuencia, los usuarios pueden acceder de forma fácil y asequible a la información que necesitan sin la carga de una gestión o un aprovisionamiento complejos.

Los servicios en la nube resultan atractivos para muchas empresas porque pueden ampliarse fácilmente, apoyando y atendiendo a una base de usuarios cada vez mayor. Dado que el proveedor de servicios en la nube está a cargo del hardware y la infraestructura de nube que hay detrás de esta tecnología, la empresa puede minimizar el desperdicio de recursos y mantener a su personal de TI en proyectos más valiosos que en las actividades de aprovisionamiento de servicios en la nube.

¿Cómo funcionan los servicios en la nube?

Los servicios en la nube son servicios alojados por un proveedor de servicios en la nube. El proveedor virtualiza el software y las aplicaciones que residen en sus servidores físicos en centros de datos masivos. Los servicios virtualizados están disponibles para que los clientes accedan a ellos a través de Internet. Con una simple conexión a la red, los usuarios pueden acceder a aplicaciones y servicios sin tener que alojar una gran cantidad de hardware físico o instalar software en sus dispositivos. Guardar datos "en la nube" significa almacenar información en un servidor remoto propiedad de un proveedor de servicios de nube en lugar de hacerlo en los propios servidores de su empresa.

Los proveedores de servicios en la nube suelen cobrar a los clientes que utilizan sus servicios mediante una suscripción mensual o por uso, lo que a menudo puede hacer que los servicios en la nube sean mucho menos costosos para una empresa porque no tiene que alojar (ni gestionar, mantener, actualizar, etc.) software específico en su propio centro de datos local.

Cuando se habla de servicios, los servicios en la nube pueden ser muy variados, entre ellos servidores, aplicaciones de software, redes, bases de datos, plataformas de análisis, programas de inteligencia artificial, servicios en línea para realizar operaciones bancarias, comprar o chatear con amigos, y mucho más. Los proveedores de servicios en la nube alojan, gestionan y mantienen centros de datos y recursos relacionados con el almacenamiento, la potencia de procesamiento y las redes. También mantienen la seguridad de su hardware físico y proporcionan algunas funciones de seguridad para los usuarios que acceden a datos y aplicaciones a través de la nube.

¿Cuáles son las ventajas de los servicios en la nube?

El cloud computing ofrece innumerables ventajas en su conjunto, pero los servicios en la nube en particular pueden potenciar esas capacidades al tiempo que minimizan la complejidad en general.

De hecho, las investigaciones recientes muestran que para 2025, aproximadamente el 51% del presupuesto de TI de una empresa se utilizará para el desarrollo y las operaciones de sistemas basados en la nube. Esto demuestra la importante expansión de los servicios en la nube, especialmente teniendo en cuenta que el desarrollo y las operaciones de sistemas basados en la nube representaron solo el 41% del presupuesto de TI en 2022. 

Los servicios en la nube ofrecen varias ventajas que resultan atractivas para las empresas, entre ellas:

• Reducción de la necesidad de hardware. Las empresas pueden reducir o incluso eliminar la huella de sus centros de datos confiando en servicios de cloud computing en lugar de servidores físicos y reducir el número de especialistas de TI que hacen falta en un centro de datos. 

• Ahorro excelente. En comparación con los planteamientos de centros de datos tradicionales, los servicios en la nube ofrecen un modelo de consumo más flexible, que permite a las empresas pagar solo por los servidores y la infraestructura que necesitan. Durante los parones, estos recursos pueden desaprovisionarse y utilizarse más adelante si es necesario.

• Disminución de la carga de TI. Dado que los servicios en la nube son gestionados por el proveedor de la nube, las empresas no necesitan preocuparse por mantener el tiempo de actividad por su cuenta. En su lugar, pueden centrar su atención y recursos en otras actividades. Siempre que dispongan de acceso a Internet, los empleados pueden acceder a sus datos y aplicaciones desde casi cualquier lugar del mundo.

• Acceso en cualquier momento y desde cualquier lugar. El personal hoy en día es nómada y, en gran medida, remoto, de modo que los servicios en la nube necesitan que los datos y las aplicaciones estén disponibles pase lo que pase. Tener servicios en la nube significa que los empleados pueden trabajar desde cualquier lugar y desde cualquier dispositivo, incluidos teléfonos móviles y tabletas.

• Colaboración mejorada. Los equipos remotos pueden trabajar a través de una única plataforma virtual, compartir detalles en tiempo real y trabajar mediante un sistema de almacenamiento compartido en la nube. Además, esta ventaja colaborativa significa una menor dependencia de los centros de datos físicos, lo cual lleva a negocios más ecológicos.

¿Cómo se utilizan los servicios en la nube?

Hoy en día, hay miles de formas de utilizar los servicios en la nube. La mayoría de las empresas ofrecen servicios en línea, incluso si se trata de algo tan sencillo como iniciar sesión para verificar los detalles de su cuenta. La gente espera que las empresas ofrezcan servicios en la nube para programar citas y registrarse en ellas, realizar compras, transferir fondos, obtener resultados de pruebas médicas, obtener calificaciones escolares, inscribirse en clases, solicitar recetas médicas y mucho más de manera cómoda y práctica. Y no se trata solo de servicios para el consumidor: las empresas utilizan los servicios en la nube con la misma frecuencia.

Estos son algunos de los servicios en la nube más comunes utilizados por las empresas modernas: 

• Correo electrónico: hoy en día la mayoría de la gente utiliza servicios en la nube para el correo electrónico, incluso si su empresa tiene un servidor para este fin. Esto se debe a que a los empleados les gusta utilizar diversos dispositivos y acceder al correo electrónico dondequiera que estén, siempre que lo necesiten. Los servicios de correo electrónico a través de la nube mantienen en estrecho contacto a los compañeros de trabajo.
• Servicios de colaboración: los espacios de chat y uso compartido de archivos, como Slack o WebEx, permiten a los equipos de trabajo hacerse consultas y colaborar independientemente de dónde se encuentre cada miembro del equipo.
• Servicios de reuniones: al igual que los servicios de colaboración, las aplicaciones de reuniones en línea permiten a las empresas reunirse con clientes, compañeros de trabajo, partners, inversores y otras partes interesadas de todo el mundo.
• Análisis de big data: los datos son un activo primordial para cualquier empresa, y los programas de análisis modernos permiten a los líderes obtener información crítica sobre sus operaciones, procesos, productos y otros aspectos para ver cómo pueden optimizar, ahorrar dinero y ser más eficientes.
• Desarrollo de software: muchos servicios en la nube facilitan el desarrollo de software y aplicaciones, lo cual es fundamental para que las empresas puedan ofrecer los servicios en línea que desean sus clientes.
• Plataformas de IA y aprendizaje automático: la IA y el aprendizaje automático son cada vez más comunes en los espacios empresariales ya que las empresas están aplicando estas tecnologías de vanguardia a sus desafíos más críticos.
• Copia de seguridad y recuperación de datos: muchas empresas emplean servicios de copia de seguridad y recuperación en línea gestionados por proveedores externos para garantizar que sus datos y aplicaciones sigan estando disponibles en caso de un fallo de seguridad o un mal funcionamiento del sistema.
• Seguridad y regulación: algunos proveedores también ofrecen prácticas aplicaciones de seguridad y regulación en línea, que ayudan a las empresas a cumplir con los mandatos de seguridad y privacidad, en constante evolución y cada vez más complejos. 

Tipos de servicios en la nube

Los servicios en la nube están estrechamente vinculados a las ofertas de la nube como servicio: software como servicio (SaaS), plataforma como servicio (PaaS) e infraestructura como servicio (IaaS). 

Infraestructura como servicio (IaaS)

IaaS utiliza Internet para ofrecer operaciones de soporte y recursos virtuales. En este modelo, un proveedor de nube es responsable de alojar la infraestructura, que también incluye el hardware, los servidores, el hipervisor y otras capas. Estos componentes suelen abarcar procesamiento, almacenamiento, sistemas operativos, virtualización y redes, y algunos proveedores incluso amplían sus servicios para incluir bases de datos y colas de mensajes. Piense en ello como tener un centro de datos virtualizado en la nube con el que los usuarios interactúan a través de una API o un panel. Si bien esto otorga a los usuarios un control sustancial, todavía tienen la tarea de supervisar la gestión del sistema operativo, el middleware, el entorno de ejecución, las aplicaciones y los datos. Dos de los ejemplos de IaaS más conocidos son Amazon Web Services (AWS) y Microsoft Azure.

Plataforma como servicio (PaaS)

PaaS proporciona los elementos esenciales para el desarrollo, las pruebas, la ejecución y el mantenimiento del software. Esto abarca infraestructura, sistemas operativos, middleware, entornos de desarrollo y herramientas de desarrollo. Los desarrolladores suelen utilizar PaaS para crear su software y aplicaciones en lugar de adquirir una infraestructura costosa o empezar desde cero con su propio código complejo y lento. Por lo general, los usuarios se conectan a esta plataforma a través de Internet, lo cual les permite concentrarse en sus aplicaciones sin la necesidad de manejar la administración de recursos. Con PaaS, los usuarios tienen la flexibilidad de implementar aplicaciones estandarizadas o personalizadas, aprovechando los lenguajes de programación, scripts, API y herramientas compatibles. Amazon Web Services (AWS), Elastic Beanstalk, Microsoft Azure y Magento Commerce Cloud son ejemplos de PaaS.

Software como servicio (SaaS)

SaaS es la oferta orientada al usuario más reconocida. Representa un enfoque operativo en el que las aplicaciones están alojadas en la nube, accesibles para los usuarios a través de Internet. Las aplicaciones y los datos los gestiona la empresa, mientras que el resto (incluidos servidores, almacenamiento, redes y más) lo gestiona el proveedor de nube. Algunos ejemplos de SaaS son Google Apps, Dropbox, Salesforce, Cisco WebEx, Microsoft Office 365 y Workday. 

Todo como servicio (XaaS)

Todo como servicio (XaaS) se refiere a una amplia categoría de servicios de cloud computing en los que se proporcionan varios recursos y capacidades como servicio a través de Internet. Es un modelo flexible y escalable que permite a las empresas acceder y utilizar una amplia gama de recursos y servicios relacionados con la tecnología, desde componentes de infraestructura tradicionales como la potencia de procesamiento y el almacenamiento (IaaS) hasta las aplicaciones de software (SaaS) y muchos otros servicios intermedios.

Servicios en la nube vs. servicios web: ¿Cuál es la diferencia?

Actualmente, las empresas tienen varias opciones en cuanto a productos de seguridad de aplicaciones, la mayoría de las cuales entran en una de las dos categorías siguientes: herramientas de pruebas de seguridad (un mercado consolidado que tiene la intención de analizar el estado de la seguridad de sus aplicaciones) y herramientas de "blindaje" de seguridad, que protegen y refuerzan las aplicaciones para que sea mucho más difícil cometer infracciones. 

Dentro de los productos de pruebas de seguridad, hay categorías todavía más concretas. En primer lugar, están las pruebas estáticas de seguridad de aplicaciones, que supervisan puntos específicos del código durante el proceso de desarrollo de la aplicación, lo cual ayuda a los desarrolladores a asegurarse de que no estén creando involuntariamente deficiencias de seguridad durante el proceso de desarrollo. 

En segundo lugar, están las pruebas dinámicas de seguridad de aplicaciones, que detectan carencias de seguridad en código en ejecución. Este método puede imitar un ataque a un sistema de producción y ayudar a los desarrolladores e ingenieros a defenderse de estrategias de ataque más sofisticadas. Tanto las pruebas estáticas como las dinámicas son beneficiosas, por lo que no es de extrañar que haya surgido un tercer tipo, las pruebas interactivas, que combina las ventajas de ambas.

Por último, las pruebas de seguridad de las aplicaciones móviles, como su propio nombre indica, detectan carencias en los entornos móviles. Este método es único porque puede estudiar la forma en la que un atacante utiliza un sistema operativo móvil para vulnerar el sistema y las aplicaciones que se ejecutan en él. 

Pasemos al "blindaje" de aplicaciones. Como se ha mencionado, las herramientas de esta categoría están destinadas a proteger las aplicaciones contra ataques. Aunque suena ideal, es una práctica menos establecida, especialmente en comparación con las herramientas de prueba. No obstante, a continuación se presentan las principales subcategorías dentro de esta categoría de herramientas.

En primer lugar, tenemos la autoprotección de la aplicación en tiempo de ejecución (RASP, por sus siglas en inglés), que combina estrategias de prueba y de protección. Estas herramientas supervisan el comportamiento de las aplicaciones tanto en entornos de escritorio como móviles. Los servicios de RASP permiten a los desarrolladores estar al día sobre el estado de la seguridad de las aplicaciones con alertas frecuentes, e incluso puede salir de una aplicación si todo el sistema se ve comprometido.

En segundo y tercer lugar, la ofuscación de código/aplicación y el software de cifrado/anti-manipulación son dos categorías que sirven esencialmente para el mismo propósito: evitar que los ciberdelincuentes pirateen el código de una aplicación.

Por último, las herramientas de detección de amenazas se encargan de analizar el entorno en el que se ejecutan las aplicaciones. Esta categoría de herramientas puede evaluar el estado de dicho entorno, detectar posibles amenazas e incluso puede comprobar si un dispositivo móvil se ha puesto en peligro debido a "huellas digitales" únicas del dispositivo.